El género del survivor-like ha sufrido incontables modificaciones, con cada lanzamiento, los desarrolladores buscan darle un sello propio, tuvimos gestión de inventario con God of Weapons, construcción con Achilles: Survivor, y ahora los dioses se ponen de nuestro lado en Jotunnslayer: Hordes of Hel.

Este nuevo roguelite de Games Farm y ARTillery nos lleva a recorrer los mundos nórdicos, pero no al estilo Kratos, empeñado en arrasar con su mitología. Aquí ocurre lo contrario: los dioses nos conceden su favor. Pero basta de introducciones e iniciemos con la reseña de Jotunnslayer: Hordes of Hel.

Una clara evolución del género.

Como ya es común en el género, la historia pasa a un segundo plano: sabemos que tenemos que viajar a los reinos nórdicos para derrotar a los Jotun, unos seres gigantescos que odian a los dioses. Aunque aquí se quiso presentar la historia con una cinemática, el juego la corta al poco tiempo de iniciar y te quedas con las ganas de saber más.

Ya dentro del juego, tenemos la jugabilidad clásica del género. Primero elegirás un personaje de entre los seis disponibles; cada uno de ellos cuenta con habilidades únicas. Por ejemplo, el Berserker y su furia son claves a la hora de combatir cuerpo a cuerpo. Si prefieres atacar desde la distancia, el Renacido y su arco son la mejor elección. Si te inclinas por los estados alterados, tienes dos opciones: la Profetisa puede maldecir a los enemigos y la Hermana de la Llama los puede quemar.

Sea cual sea tu elección, también es posible gastar gemas para comprar nuevas armas a tus personajes, pudiendo así mejorar ciertas estadísticas como el índice de curación, el daño, la velocidad del personaje o el porcentaje de experiencia.

Ya con tu personaje elegido, es hora de viajar a Niflheim (también podrás visitar Svartálfaheimr, Jötunheimr, Helheim y Muspelheim), un frío y desolado mundo donde serás atacado por hordas interminables de enemigos. Como sospecharás, tu personaje atacará de forma automática y tan solo deberás preocuparte por el movimiento.

Hasta ahora tenemos lo básico de un survivor, pero hay dos cosas que hacen único a Jotunnslayer: Hordes of Hel. Primero, al subir de nivel tendrás la oportunidad de elegir una mejora de clase o un favor de los dioses; estos últimos vienen en forma de poderes especiales o de mejoras para tu personaje.

En total hay ocho dioses disponibles; cada uno se enfoca en un daño elemental. Odin, por supuesto, te otorgará poderes envueltos por el rayo; con Njord atacarás con la influencia del agua, mientras que Loki y Freya se enfocan en bonificaciones de movimiento, suerte, experiencia y más.

Por otra parte, si eliges la mejora de clase, los poderes y mejoras se enfocan directamente en darle bonificaciones a tus puntos más fuertes. Es más, cuando llegues al nivel 10 podrás hacer una mejora de subclase para especializarte en curación, ataque o movimiento.

El segundo elemento diferenciador de Jotunnslayer: Hordes of Hel es que cada cierto tiempo podrás realizar una misión secundaria. Las hay de todo tipo: puzles, matar un jefe secundario, luchar bajo una tormenta de nieve o bajo un calor infernal, e incluso el típico “mata 150 enemigos en esta parte del mapa”. Al completarla se te premiará con oro, un ítem muy importante para futuros viajes.

La jugabilidad se basa en sobrevivir 10, 15 o 20 minutos (también hay modo infinito). Cuando estés muy próximo a completar ese tiempo, se activará un evento y tendrás que luchar contra un Jotunn. Esta pelea contra un jefe pondrá a prueba todas las mejoras y poderes que obtuviste durante tu viaje, y si ganas serás recompensado con un nuevo escenario, un nuevo personaje y hasta un nuevo dios.

Al ser un roguelite, deberemos mejorar al personaje en busca de ser más eficientes y dañinos en la próxima visita a los nueve reinos, y para eso tenemos la Tienda de Atributos: por cada 15 de oro obtenido ganarás un punto de atributo. Estos los podrás gastar en un pequeño árbol de habilidades; cada personaje tiene su propio árbol, así que enfócate en mejorar aquel que más se ajuste a tu forma de jugar, aunque es posible restablecer los puntos y gastarlos en otro personaje.

Los dioses también se pueden mejorar, dándote aún más ventajas; sin embargo, te sugiero que mejores a los dioses de forma uniforme y no gastes todo en un solo dios, ya que su aparición es aleatoria y puedes estar gastando puntos en vano.

En cuanto a lo gráfico, Jottunslayer cuenta con modelados para personajes, enemigos y escenarios muy bien detallados. El rendimiento también es el correcto, al menos el PS5 Pro donde hicimos la reseña. Lastimosamente, tenemos varios bugs como el que te conté de la cinemática, además el juego se me cerró varias veces, aunque no perdí mi progreso general, si perdí el tiempo que llevaba en esa partida.

Finalmente, Jotunnslayer: Hordes of Hel es una excelente evolución del género survivor-like, sus bendiciones divinas y misiones secundarias lo diferencian lo suficiente para no ser un simple clon. Te recuerdo que el juego ya está disponible en PlayStation 5, Xbox Series X|S y PC vía Steam.